En el mundo de los alojamientos icónicos
de Lisboa tiene un espacio propio, merecidamente ganado a lo largo de los años,
este hotel.
Un edificio de bastante altura
(supera los veinte pisos), ya emblemático, muy reconocible por su arquitectura
acristalada en su parte superior y tonalidades azules. Nos encontramos, para
situarnos, en la zona de Amoreiras, junto al centro comercial.
“Dom Pedro Lisboa” (perteneciente
al selecto grupo Great Hotels of the World) es un auténtico regalo de
magníficas experiencias para el huésped. Por citar un detalle, nada baladí, brinda
algunas de las mejores panorámicas de Lisboa y de la desembocadura del Tajo. Un
argumento difícil de igualar gracias a su envidiable emplazamiento.
A ello hay que sumar un minucioso
y meticuloso trabajo tratando de lograr la perfección para que el huésped
aprecie lo que significa la marca “Dom Pedro”: exclusividad, singularidad,
servicio, esmero, una ubicación privilegiada, elegancia y mucha dedicación. Un
elemento diferenciador digno de ser tenido en cuenta.
Así es, habitaciones y suites de
ensueño, con decoraciones clásicas y –a la vez- elegantes, dotadas con todo
tipo de servicios y accesorios, permiten una estancia relajada e inolvidable. Y
es que “Dom Pedro Lisboa” sabe ser el perfecto anfitrión.
Gastronómicamente hablando, sus
dos emblemáticos restaurantes evidencian los altos niveles culinarios de estas
cocinas.
“Il GattoPardo” ofrece una
experiencia gastronómica italiana de altura; todo un sugerente viaje,
acompañado de mucha creatividad, a través del paladar por los sabores del país trasalpino.
Si, por el contrario, deseamos sumergirnos en las bondades de la gastronomía portuguesa, nada mejor que “Bristot Le café”. Un sobresaliente surtido de diferentes platos de la cultura gastronómica lusa, perfectamente preparados y emplatados, nos va trasladando, con la ayuda de los espectaculares vinos del país, por diferentes regiones de Portugal.
Unos tradicionales “lombinhos de
porco preto corados con presunto”, unas típicas "costeletas de borrego
grelhadas", una “sopa de peixe e mariscos” o un "bacalhau confitado em
aceite, alho e alecrim” se convierten en platos de altos vuelos al salir de
estos fogones.
A todo esto, hay que unir un
surtido desayuno buffet, ideal para coger fuerzas pensando en la jornada que
nos espera recorriendo Lisboa.
Esa relajación que busca y
consigue el cliente, ese bienestar que supone pernoctar o pasar por este cinco
estrellas único, se acentúa si ponemos atención en su propuesta “Spa Aquae”. Un
refugio de tranquilidad y paz asentado en su piscina interior y una sugerente
carta de masajes y tratamientos de todo tipo.
Así pues, todo está cuidado con el máximo esmero, desde el pormenor más insignificante al detalle más importante. Por citar un ejemplo, los amenities son de magnífica calidad.
No es de extrañar que importantes personalidades a nivel mundial,
de todos los ámbitos de la vida pública, pusieran sus ojos en “Dom Pedro
Lisboa” cuando han decidido viajar a la capital portuguesa.
Su amplitud de espacios (estamos
en uno de los mayores hoteles de Lisboa de estas características y nivel) le da
una versatilidad difícil de igualar. Ideal para la organización de todo tipo de
eventos, sea cual sea el tamaño (bodas, celebraciones, presentaciones, cursos, reuniones,
conferencias, ...). Mil cuatrocientos metros cuadrados distribuidos en hasta
dieciséis salas dan mucho de sí.
Reconozco que había pasado cerca
de este hotel lisboeta en varias ocasiones, había oído hablar mucho -y muy bien-
de él, pero nada como la experiencia de sentir “in situ” lo que es alojarse en
tan sugerente entorno. Todo un sueño al que llamaría “experiencia Dom Pedro
Lisboa”.
Cuando lo prueben, cuando
pernocten en sus habitaciones, cuando coman en alguno de sus restaurantes,
cuando deambulen por sus estancias o cuando disfruten de sus vistas desde la
parte alta del hotel, seguro que se acordarán de estos párrafos y coincidirán
plenamente con cuanto escribo.
Háganme caso, si vienen a Lisboa,
piensen en este magnífico cinco estrellas, referencia desde hace bastantes años
en el mundo de los grandes hoteles de lujo de Lisboa.
Acabo trascribiendo el comentario
de uno de los huéspedes que pasó por “Dom Pedro Lisboa”: “para repetir”. No
preciso decir más.
Estos párrafos se publicaron en el diario español LA RAZÓN el 19 de febrero de 2024.
“Dom Pedro Lisboa”, un cinco estrellas referencia (larazon.es)
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