Ya he comentado en alguna ocasión que Portugal es uno de los países donde se entiende más de café de Europa. Por decirlo de otra forma, "un país cafetero". Porque cafetero no significa únicamente que tenga plantaciones o cultivos de café. También, en mi opinión, este calificativo se debe aplicar a quien elabora, sabe y conoce el mundo del café.
Diría que es en Italia y Portugal donde, del viejo continente, está más arraigada la cultura de beber buen café.
Y si, como comentaba, son nuestros vecinos (por cultura, por tradición y por historia) unos apasionados por esta bebida, hay una ciudad (Campo Maior, en Alentejo fronterizo) que es un exponente de ello.
Entre otras cosas, o principalmente, porque aquí se encuentran las instalaciones de la multinacional "Delta Cafés", del grupo Nabeiro (https://www.gruponabeiro.com/es).
Pues bien, en este municipio podemos visitar el Museo del Café (inaugurado en 1994) que, según me comentaron, es el único existente en la península ibérica, y uno de los pocos de Europa.
El recorrido es tremendamente didáctico. Desde las variedades y tipos de granos hasta el proceso de producción y venta. Incluso, además de una sala de exposiciones, existe un pequeño invernadero con diferentes plantas de café. Un curioso y agradable paseo por este mundo tan "aromático" que puede ser el perfecto colofón a un día en esta localidad fronteriza del Alentejo norte.
Siempre es agradable pasear por Campo Maior (a sólo 15 kilómetros de la frontera española) y, de paso, visitar este museo (situado en la carretera que va a Portalegre), mientras un experto barista nos explica cómo debe prepararse, servirse y degustarse un buen café.
Todo un aprendizaje y todo un acercamiento a una de las bebidas más célebres y comercializadas del mundo.
Quiero recordar en este post la figura del "alma mater" de todo este gran imperio empresarial. El señor Comendador D. Manuel Rui Nabeiro. Él es toda una institución en Portugal. De fácil conversación, hizo de experto cicerone (¿quién mejor que él?) con este blog, enseñándome las diferentes salas del museo. Me comentaba que, por circunstancias personales, tuvo que empezar a trabajar a muy temprana edad.
Incansable, trabajador, persona solidaria y cercana es, además de un amante de su pueblo (Campo Maior) y su país, un enamorado de España.
Ese imperio que creó, que da riqueza y trabajo a su pueblo, está diversificado en sectores de diversa índole.
Uno de ellos es la industria vitivinícola. Como ejemplo, la cercana bodega de "Adega Maior", cuyo edificio, diseñado por el prestigioso arquitecto portugués Álvaro Sisa Vieira, guarda el preciado tesoro de los famosos vinos que proceden de las grandes extensiones de viñas que envuelven al edificio.
Como reconocimiento a su labor empresarial, por su estrechos lazos con España, por ser una referencia, por su defensa de la gastronomía fronteriza rayana y por su inagotable trabajo se procedió, en las instalaciones de esta "adega" por parte de la "Academia Extremeña de Gastronomía", a su nombramiento como Académico de Honor. En el mismo acto se le hizo entrega del Mandil de Corcho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario